Capítulo 40.

Domingo 21 de octubre de 2011.
Todos están dormidos o por lo menos eso es lo que piensa Verónica, ya lo tiene todo listo, espera que todo salga bien, tiene miedo, no lo reconoce, coge una maleta, la levanta.
Va deprisa incluso demasiado, la maleta se le hace pesada, llega a las escaleras, las baja poco a poco pero cuando apenas faltan un par de escalones siente que se cae que no puede con su alma, todo empieza a moverse a su alrededor, comienza a sudar pero frío, baja el par de escalones que le quedan y se cae, se desmaya pierde las pocas fuerzas que le quedan para seguir hacia delante, nadie de la casa se ha percatado.
Pasan las horas lentamente ya son las 7 de la mañana, Manuel abre los ojos y otra vez más esta solo.
Piensa para sus adentros el nunca ha sido cobarde, intenta decidirse.
La madre de Verónica lleva puesta su bata ya que últimamente hacia mucho frío, baja las escaleras y de repente la ve ahi tirada, corre, grita llama a todas las personas, la trata de coger de brazos pero llega su padre y la coge en brazos, la acuestan en su cama, tratan de hacerla reaccionar pero nada.
Sergio esta muy inquieto apenas ha dormido en toda la noche, siente que va a ocurrir algo malo pero no sabe el que.
La madre de Verónica llora, se siente culpable, necesita hablar con su hija, recuerda todos aquellos momentos felices y como fue cambiando como se convirtió poco a poco en una mujer muy dura, sin miedos.
Sergio desayuna y de repente le viene el recuerdo de Verónica y se pone a llorar, sus padres no saben lo que pasa, su madre lo abraza.
Han pasado unas dos largas horas, son como las nueve de la mañana, se han llevado a Verónica a un hospital privado, sus padres estan hablando con el doctor.
-Doctor: su hija esta muy débil, no se ha que se debe pero todos los analisis salen bien, simplemente les recomiendo que la dejen descansar.
-Madre: gracias, doctor.
Pasa el día, triste para los padres de Verónica se ha pasado todo el día practicamente durmiendo.